Todo listo para el comienzo de la remodelación del estadio de la Cartuja. Los primeros pasos de la reforma del recinto consisten en la ampliación del graderío en 12.442 asientos. Será en dos fases, una para un movimiento de tierra que se iniciará a principios de julio, a la que le seguirá obras de cimentaciones, estructuras, instalaciones, revestimientos y acabados. El cronograma se extiende hasta finales de abril. La Gerencia de Urbanismo ya ha otorgado la licencia necesaria. En paralelo, los técnicos ya trabajan en las mejoras posteriores como la ampliación de la cubierta, la digitalización de las instalaciones, la remodelación de la estética de la fachada y el proyecto para potenciar la accesibilidad y la urbanización de la zona exterior. Todo para convertirlo en un estadio de fútbol de cinco estrellas.
En el documento al que ha tenido acceso este periódico, los arquitectos Antonio Cruz y Antonio Ortiz explican los antecedentes y condicionantes de partida. El estadio de atletismo de la Cartuja fue diseñado como estadio olímpico para la candidatura de Sevilla a los juegos olímpicos de 2004. Tras no ser la ciudad elegida, acogió finalmente la celebración del Mundial de Atletismo en 1999. Tres años antes, su estudio de arquitectura recibió el encargo de desarrollar un proyecto que siempre contempló la posibilidad de poder adaptarse posteriormente a estadio sólo para la celebración de partidos de fútbol. “Las pendientes del graderío y las superficies de evacuación, contemplaban ya el incremento de espectadores que se producirá al deprimir el nivel del terreno de juego, con un incremento aproximado de 12.000 espectadores”.
Esta adaptación consiste fundamentalmente en deprimir la cota prevista para la pista de atletismo con la intención de incrementar el número de espectadores sin perturbar las condiciones de visibilidad, consiguiendo además el acercamiento del público al terreno de juego. Desde los inicios del 2020, se pretende convertir en un estadio de referencia dentro del ámbito nacional e internacional, para lo que es necesario la eliminación de la pista de atletismo y la reconversión a estadio de fútbol. El objetivo es que se convierta en una de las sedes de la candidatura formada por España y Portugal para acoger el Mundial de Fútbol de 2030.
El proyecto ya tiene el visto bueno de Urbanismo contempla la eliminación de la pista de atletismo actual, la depresión del terreno de juego hasta una cota inferior de casi cuatro metros para construir un nuevo campo de fútbol con las dimensiones establecidas por la UEFA (105 metros de largo por 68 de ancho) y un graderío, que será completamente nuevo en la zona Norte y Sur previo a la excavación en la que se retirará el graderío provisional actual. Por su parte, en Preferencia y Fondo se construirá un graderío en continuación con el existente. La intervención se concentra sobre el terreno de juego y el graderío bajo, aunque se trabaja puntualmente en el estadio para habilitar el acceso al nuevo graderío y dotarlo de los servicios necesarios como se desarrollará más adelante.
En lo que se refiere a la demolición de las gradas, existen dos situaciones: en el sector Sur y Norte, donde los graderíos son desmontables y su eliminación tiene menor complicación; y en los graderíos Este y Oeste, en dónde se desmontan ocho graderíos, se elimina un recrecido que los elevaba respecto al pórtico original para adecuar la visibilidad a la pista de atletismo y se recolocan en el pórtico original. Además de estas ocho filas, se construye uno nuevo en continuidad con este para acercar a los espectadores a la nueva posición del campo.
La ampliación de los espectadores lleva vinculada un aumento del número de servicios y bares. En el caso de la zona Norte y Sur, se utilizará el espacio que actualmente ocupan una serie de almacenes en el nivel -1 para adecuar un espacio ampliado, ubicando en esta zona dos grandes núcleos de aseos que doten al nuevo graderío de un ratio de aseos adecuado según la regulación UEFA. También se dotará de nuevos bares y de un nuevo acceso accesible que permiten la inclusión de nuevos asientos accesibles en el nuevo graderío construido en los goles del estadio.
Por su parte, en la zona de Preferencia y Fondo, el acceso al graderío se mantiene a través de los vomitorios existentes. Los nuevos aseos se resuelven en la zona bajo graderío entre los pórticos, donde ya existen algunos aseos que sirven a zonas vips y que se reformarán para dar servicio al nuevo aforo del graderío bajo de esas dos gradas del estadio de la Cartuja. Respecto a los bares, la dotación se aumentará y se resolverá en la cota de acceso de estos sectores.
La ampliación del nuevo graderío bajo supone un aumento de 12.442 espectadores, contando también aquellos que se han eliminado por la demolición de los graderíos provisionales. Frente a los 58.932 espectadores actuales, tras la adaptación del estadio, la capacidad aumentaría hasta los 71.374 espectadores, habilitando el estadio para convertirlo en un estadio cinco estrellas según la clasificación de la UEFA. Esta primera fase tiene un coste de 9,5 millones de euros.
En coordinación con las diferentes administraciones, queda pendiente realizar mejoras en los accesos y el entorno, así como la puesta en marcha de un contundente plan de movilidad que haga más permeable los accesos para el usuario. El estadio de La Cartuja se ha posicionado en los últimos años como uno de los escenarios más importantes del fútbol español, y con esta actuación se situará a la cabeza en cuanto a instalación deportiva y polivalente, dotándola de los servicios e instalaciones más modernas que permitan albergar todo tipo de eventos y salvar con solvencia los estándares requeridos tanto por FIFA como por UEFA.